Semana Santa
La semana Santa de Santa Bárbara siempre ha sido sencilla, solemne y austera, con recogimiento, con fe. Es curioso que los primeros datos sobre cofradías en la Villa, los tengamos en el siglo XVIII, donde nos encontramos con dos Cofradías, la del Santísimo Sacramento y la de Vera Cruz.
La Semana Santa, hasta la Guerra Civil, de la que tenemos conocimiento, salía con gran solemnidad, los hombres, todos de negro, con su capirucho verde oscuro, jóvenes rudos curtidos en mil labores del campo, sacaban con sumo cuidado las imágenes, parecían andar sobre plumas, más despacio no se podía, más mimo, más cariño y más amor hacia la Madre de Dios, tampoco.
Actualmente la Semana Santa ha perdido todo ese fervor y devoción que antaño le daban sus hijos. No hay Cofradías y la mayoría de los jóvenes han abandonado ese fervor anteriormente citado. Por lo que resulta una fiesta o celebración religiosa, sencilla y austera.