La Matanza
En casi todos los pueblos de la provincia de Huelva se celebraba esta fiesta; y digo fiesta, porque la matanza del cerdo era una ocasión para reunir a toda la familia y amigos en casa. Es verdad que también se necesitaba para tener esos chorizos, morcillas, tocino, lomo, jamones, manteca... que tanta falta haría a lo largo del año para los rudos trabajadores del campo y para aquellos pastores que tantos recuerdos nos traen; pues el cacho de tocino vetado o el buen pedazo de chorizo junto con una quesiña dura metida en aceite debía ser la comida del día hasta la llegada de la noche, cuando les esperaba una buena olla (parecida a la que hoy conocemos como cocido).